En ocasiones desperdiciamos nuestra última oportunidad de conseguir nuestros sueños por no volver a intentarlo una vez más. Sea cual sea nuestro anhelo, abandonamos la posibilidad de conseguirlo por no perseverar, no siendo conscientes de que la última llave es siempre la que abre la puerta.
Ambientado en un mundo en el que los deseos de seres míticos que viven bajo las fuentes otorgan deseos, un conseguidor de deseos apático se ve obligado a ir por encima del suelo para conceder un deseo de amor… ¿será capaz de lograrlo?